SERVICIOS SOCIALES
Cuidadores asistenciales de Soria barajan llevar a los tribunales el convenio con la Junta
Aseguran que es un «documento en blanco» sobre sus funciones y rebaja su categoría
El colectivo de cuidadoras (CTSA Cuidadores Técnicos Asistenciales de Soria) protestan ante los sindicatos y la Delegación Territorial de la Junta por la firma del convenio laboral que rebaja su titulación. Más de una veintena de trabajadoras protestan por la equiparación del grado medio de la formación profesional con su titulación de grado superior. FOTOGRAFO: MARIO TEJEDOR
La Junta de Castilla y León y los sindicatos CCOO, UGT y CGT firmaron el pasado 12 de junio el convenio colectivo del personal laboral de la Administración, un texto que cumple los peores temores del colectivo de cuidadores técnicos de servicios asistenciales, y que vienen denunciando desde el preacuerdo en marzo. El principal desacuerdo viene motivado porque el convenio «rebaja nuestra titulación», indica Laura Gonzalo, trabajadora del Centro de Atención de Minusválidos Psíquicos y Centro Ocupacional (CAMP-CO) Ángel de la Guarda, dependiente de la Gerencia de Servicios Sociales. Indica que para ocupar su puesto ya no hace falta tener la titulación de Bachillerato o de Formación Profesional de grado superior, sólo será necesaria Formación Profesional de grado medio. «Tienen distinta carga lectiva, y para llegar al superior hay que tener el medio», explica para poner en situación sobre la merma que les supone el nuevo convenio.
Por este motivo, barajan la opción de acudir a los tribunales como único lugar donde dirimir este perjuicio, ya que los sindicatos mayoritarios han estado a favor. De hecho, su protesta de ayer, en la que con un ataúd simbolizaron el fallecimiento de los servicios asistenciales, discurrió desde la sede de los sindicatos hasta la Gerencia de Servicios Sociales y posteriormente la Delegación de la Junta de Castilla y León, siempre bajo el grito de «asesinos», por considerar que este giro va a suponer un descenso en la calidad en la asistencia a los usuarios.
No descartan nueva movilizaciones que han venido repitiendo desde marzo, incluida la fiesta del 1 de mayo contra los sindicatos.
«Es una pena que la Junta de Castilla y León, que ha sido pionera en una atención más global ahora tira eso por la borda», señalan las cuidadoras, recalcando que lo acordado en el nuevo convenio «va en detrimento de los usuarios porque va a volver a modelos en los que se presta atención básica, comida y baño, en lugar de las actividades de integración que se vienen realizando. El modelo se aleja de lo existente hacia algo meramente asistencial», lamenta Gonzalo.
Asimismo, los cuidadores técnicos de servicios asistenciales indican que el convenio deja no especifica sus funciones que les corresponden, por lo que creen que se les incluirán otras nuevas, «como hacer las camas o dar la medicación». «Es un documento en blanco», aseguran.
El origen de estos cambios se encuentra en la adaptación de la Formación Profesional con el modelo europeo y también de la ley de dependencia europea. Sin embargo, el colectivo sostiene que la Unión Europea establece «unos mínimos y cada comunidad autónoma puede ampliarlo, pero la Junta no ha querido hacerlo, apostando más por un enfoque hacia la persona, no sólo la asistencia básica». «Nos podía haber mantenido la categoría», resalta Gonzalo para resumir el sentir de un colectivo que en Soria es de 90 personas y 600 en todo Castilla y León.