Heraldo-Diario de Soria

Tribunales

Condenado en Soria a un año de cárcel por estafa al vender máquinas pinball y no enviarlas

Publicó el anuncio en una web y tras recibir 2.400 euros del comprador no se las entregó

Audiencia Provincial de Soria.

Audiencia Provincial de Soria.Mario Tejedor Hernández

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La Audiencia Provincial de Soria ha condenado a un año de cárcel y al pago de 1.700 euros al acusado de un delito de estafa, por vender seis máquinas recreativas de pinball y tras recibir el dinero, 2.400 euros, no formalizar la entrega al comprador.

El tribunal considera probados los hechos delictivos descritos por la Fiscalía, que también fueron reconocidos por el propio acusado, por lo que se llegó a un acuerdo, rebajando a un año la pena solicitada frente a los tres años y medio que pedía inicialmente el Ministerio Fiscal.

Además, el escrito de calificaciones provisionales de la Fiscalía acusaba también a una segunda persona, cuya acusación fue retirada finalmente del escrito definitivo de la Fiscalía, por lo que concluida la vista ora, y dado que contra ella no había acusación, se procedió a su absolución.

Según la sentencia, el acusado anunció la venta de seis máquinas recreativas de pinball en la página de internet Milanuncios. A principios de 2021, contactó con él el denunciante, interesado en la adquisición de las mismas. Mantuvieron conversaciones por teléfono y vía whatsapp hasta que llegaron a un acuerdo de venta de las seis máquinas pinball por valor de 2.424 euros. De este modo, el denunciante realizó una transferencia inicial de 2.138 euros a un número de cuenta.

Pasados unos días y dado que al comprador no le llegaba la mercancía, se puso de nuevo en contacto con el acusado quien le manifestó que faltaba por pagar el IVA e incluso, «para mantener la apariencia de que la compra era real», destaca la sentencia, le remitió por la red social una fotografía de un albarán. Después de esto, el comprador realizó una segunda transferencia por 275 euros a otro número de cuenta de la que era titular el acusado.

A pesar de todo y dado que «no tenían intención de hacerlo», como insistía el relato de la Fiscalía, nunca envió las máquinas objeto de la venta.

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