Rey aprueba con C's un Presupuesto para modernizar la provincia

PSOE y Ciudadanos dio ayer luz verde a los Presupuestos de la Diputación Provincial para 2016 que ascienden a 48,1 millones de euros. Una partida que permitirá potenciar «las inversiones para modernizar la provincia e iniciar un modelo de gestión con el que se va a primar a las personas y a la participación de los diferentes colectivos», manifestó el presidente, Luis Rey, en la presentación del borrador que votó en contra el PP.

El primer debate presupuestario de la legislatura se prolongó ayer durante tres horas, a pesar de que los grupos habían acordado unos turnos de intervención de 15 minutos que no respetaron.

Para Rey estos Presupuestos son los del «cambio político» porque apuestan por la inversión, los servicios sociales y el empleo. La partida consolidada se eleva a 48,3 millones de euros, una vez que se ha sumado el presupuesto autónomo que se destina al funcionamiento de la UNED.

La Diputación invertirá 13,1 millones de euros, una cantidad que se ha incrementado en un 1,8 millones de euros respecto al año anterior y para llevar a cabo los proyectos inversores la institución no tiene previsto endeudarse «por ahora», significó Rey. Además, este año y dentro de este capítulo se ha incluido todo el gasto previsto para las obras de Planes Provinciales, 8 millones de euros, que no dependerán del dinero de remanentes como ha ocurrido en años anteriores.

Entre las novedades, que destacó Rey en su exposición, se encuentra el incremento de las ayudas a familias con necesidad hasta los 60.000 euros y la dotación de 100.000 euros para cooperación. La puesta en marcha de becas para costear la estancia de los estudiantes del medio rural en la capital y para facilitar la incorporación laboral de los jóvenes sorianos a empleos en las empresas. El presidente confirmó el compromiso con Soria Futuro y con Cesefor, además de las partidas habilitadas para ayudar a la implantación de empresas y para impulsar el departamento de agricultura que «se encontraba al borde de la desaparición», agregó Rey.

Las nuevas políticas del PSOE al frente de la Diputación conllevan un incremento del 50% del gasto corriente en comparación con el año anterior para poder hacer frente al pago de subvenciones en las áreas de cultura, servicios sociales y empleo. El equipo de Gobierno pretende dar una vuelta a las ayudas a las empresas, cuya partida reduce a la mitad (500.000 euros) y con la posibilidad de colaborar con el Banco Europeo de Inversiones y las entidades bancarias. También se aparcan las torres de entrenamiento de los parques comarcales de bomberos de El Burgo y Ólvega a la espera de conocer cómo se va a desarrollar el consorcio provincial de bomberos.

El PP no votó a favor de los Presupuestos de la Diputación porque «lo único que han hecho es un cambio de cromos en el que no coincidimos con ustedes en el rumbo que han marcado», según manifestó, en su intervención, la portavoz, Ascensión Pérez, quien subrayó que el Presupuesto es 400.000 euros más bajo que el del año pasado. Los populares lamentaron la falta de voluntad política del grupo socialista para alcanzar un consenso sobre las partidas económicas a incluir para 2016.

Ascensión Pérez reprochó a Rey el no haber incluido ni una sola propuesta que su grupo presentó en la comisión informativa. «No vamos a votarles a favor este Presupuesto porque no cuenta con partidas serias para empleo, ni para infraestructura de comunicaciones y además venden el patrimonio cuando la institución no lo necesita porque está saneada», puntualizó Ascensión Pérez.

La portavoz se mostró contraria a la enajenación de la nave del viejo parque de maquinaria, ubicado en la capital, y tampoco aprobó que se destine una partida económica a la cooperación exterior «con todas las necesidades que tenemos en Soria, por lo que antes que nada debemos atender a la provincia y cuando vengan tiempos mejores a lo demás».

La intervención de la portavoz del PP fue duramente contestada tanto por el presidente como por el portavoz de Ciudadanos, José Antonio de Miguel. Ambos coincidieron en que Pérez no diferenció, en sus críticas, entre las partidas que en 2015 formaron parte del Presupuesto y las que se incorporaron posteriormente a cargo de los remanentes. «Hagan un acto de fe como lo hicimos nosotros el año pasado y aprueben este Presupuesto, porque muchas de las partidas que ahora dicen que no están tampoco estaban el año pasado en el borrador y se metieron con los remanentes», contestó Rey.

Por su parte, el portavoz de Ciudadanos, José Antonio de Miguel, pidió al PP que presente enmiendas y no propuestas a los Presupuestos, «díganos qué partidas quitarían ustedes para incorporar los más de tres millones de euros que cuestan incorporar todas sus pretensiones y si lo que quieren es solicitar un crédito, pues nos lo dicen también». El debate se volvió más bronco al final de la sesión. La portavoz del PP reprochó al presidente haber llevado a la Diputación a niveles de poca transparencia, de no tomarse los problemas de los pueblos en serio «porque solo le preocupa el Ayuntamiento de Soria». La portavoz del PP también se quejó de que el borrador de Presupuestos se había entregado tarde a la oposición y sin la documentación correspondiente a los anexos. Rey no le permitió esta crítica y le recordó que cuando gobernaba el PP, los plazos para entregar y debatir las cuentas eran muy similares a los que ha empleado el PSOE este año.

Ciudadanos votó a favor el borrador. El grupo comprobó que el PSOE había incorporado en el documento todas las peticiones, incluida la de dotar a todas las oficinas de turismo con la misma ayuda y no conceder más dinero a El Burgo y Medinaceli, como se venía realizando hasta ahora.

El portavoz, José Antonio de Miguel, advirtió de que se trata de una partida «escasa» pero «se trata de los Presupuestos de la transición, porque a partir de ahora las actuaciones tienen que ir por otros derroteros para mejorar la provincia». De Miguel apoyó el borrador, aunque advirtió de que no cumple con la regla de gasto, porque lo supera en 8 millones de euros, así como tampoco va a cumplir con la liquidación de 2015, ni se cumplirá con la de 2016 y obligará de nuevo a elaborar un Plan Económico Financiero, a pesar de no tener deuda.

De Miguel se refirió a la partida de remanentes con la que habrá que contar para la ejecución de obras y arreglos en carretera, así como para favorecer el empleo. Solicitó al PSOE que este dinero también se tenga en cuenta para modificar las Normas Subsidiarias de la provincia que se encuentran obsoletas y lanzó la petición de analizar más al detalle el funcionamiento de la Caja de Cooperación a la que no acuden los ayuntamientos por los elevados intereses.