SUCESOS
Fallece una mujer en una colisión en Fuentelmonge
Estado en el que quedó el vehículo tras el choque-Bomberos Diputación
Soria vive un agosto negro en las carreteras con cuatro víctimas mortales en accidentes de tráfico. El número más elevado en el periodo de un mes en lo que va de año. Solo se iguala al mes de enero, en el que fallecieron cuatro personas, pero hay que tener en cuenta que el mes de agosto todavía no ha concluido.
La cuarta víctima de agosto fue M.J.P.C., de 34 años que murió el pasado martes en un siniestro de tráfico. El suceso tuvo lugar a las 20.20 horas en el kilómetro 79,500 de la CL-116. El vehículo en el viajaba la fallecida se salió de la vía por la margen derecha y chocó posteriormente contra una valla de protección lateral, según informaron ayer fuentes de la Subdelegación del Gobierno. La víctima es vecina de Monteagudo de las Vicarías y de nacionalidad nicaragüense. El conductor del vehículo resultó herido leve.
Se trata de la décimo tercera víctima que se cobran las carreteras de la provincia de Soria en lo que va de año y es la segunda de esta semana. El pasado lunes un camionero portugués perdió la vida en un siniestro que tuvo lugar en la N-122, en el municipio de Langa de Duero.
El mes de agosto comenzó con el fallecimiento de la conductora de un turismo que colisionó con un camión. La fallecida tenía 72 años y era vecina de San Pedro Manrique. El accidente tuvo lugar en el kilómetro 209 de la N-122, en el término de El Burgo de Osma. La mujer viajaba en la parte posterior del coche. La segunda víctima de este mes fue un varón que perdió la vida en Soria capital después de que el vehículo que conducía chocara contra un puente en la N-122. El conductor fue trasladado al hospital de la ciudad aunque posteriormente murió.
La cifra de fallecidos en las carreteras sorianas ha ido descendiendo paulatinamente desde el año 2000. Sin embargo, este ejercicio está empañando la mejoría. En el último lustro, sólo en 2014 se habían superado las diez muertes en las vías sorianas. Ahora, 2016 se coloca a la cabeza de esta serie de datos con los 13 fallecidos en accidentes de tráfico a falta de cuatro meses para finalizar el año.
Desde que comenzó el siglo han perdido la vida 307 personas, con una media de 18 fallecidos por ejercicio. El año 2000, con el trágico accidente de autobús de Golmayo en el que fallecieron 28 personas, el balance total subió a las 72 víctimas y marcó el punto más trágico. Para hacerse una idea del coste humano del problema, equivale a la población del municipio de Torlengua.
No obstante los datos fueron mejorando conforme avanzó el siglo. En 2001 se registraron 38 fallecidos, cifra que nunca se ha vuelto a alcanzar. En 2008 se tocó por última vez la cifra de 20 víctimas mortales en las carreteras y desde entonces la tendencia fue a la baja.
Así, los ejercicios de 2009, 2010 y 2011 se estabilizaron en 15 fallecidos en las carreteras sorianas, un dato todavía duro pero sin duda mucho mejor que los de comienzo de siglo. Ya en 2012 el dato cayó a siete víctimas mortales, siendo el año ‘menos grave’ en este capítulo y cayendo en más de un 90% respecto al catastrófico año 2000.