Heraldo-Diario de Soria

PROVINCIA

Fin de feria solidario en Almazán

El recinto de La Arboleda acoge hoy una master class benéfica de zumba, junto a la fuente del parque, para «hacer visible» la enfermedad del ELA de la que está afectado un vecino de la villa

Imagen de expositores en la feria de Almazán, que este año ha alcanzado su edición número 57-V. Guisande

Imagen de expositores en la feria de Almazán, que este año ha alcanzado su edición número 57-V. Guisande

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P. P. S.
Soria

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La Feria de Muestras de Almazán llega a su fin hoy domingo con una jornada marcada por la solidaridad. El programa recoge una master class de zumba que tiene como objetivo «hacer visible» una dura enfermedad como es el ELA. Aunque realizada en el marco del certamen, la iniciativa está promovida por la Asociación de ELA en Madrid, según explicó Esperanza Tierno, vecina de la villa y a quien la enfermedad le toca de lleno, ya que la padece su esposo, José Vicente Jimeno.

Un estand en la feria ha informado estos días sobre la enfermedad y la importancia que tienen para los afectados asociaciones como la de Madrid, algo de lo que «hay que concienciarnos», en palabras de Esperanza, que confía en la respuesta ciudadana a la convocatoria. Una más de las que se han llevado a cabo esta semana, en la que «todo el mundo se ha volcado», comenta esta vecina de Almazán, que muestra su agradecimiento a la respuesta solidaria de Almazán: una marcha de la Cofradía de San Pascual Bailón y teatro en el colegio, ambas para recaudar fondos, al igual que hoy.

Para la sesión de hoy se han vendido 1.000 papeletas. La master class se desarrollará en el recinto ferial de 12 a 14 horas, con una profesora de zumba de Medinaceli, Lorena, y otros profesores llegados de Pamplona y Madrid. También estarán presentes miembros de la asociación madrileña, a la que pertenece José Vicente Jimeno, que se trata en un hospital de la Comunidad de Madrid y en el de Soria.

El director de la feria, Miguel Armillas, aplaudió esta iniciativa a la vez que confió en su éxito. Por la mañana, Armillas hizo un balance positivo del desarrollo de la feria, en espera de una mayor afluencia de público, ya que «la gente suele venir sobre las 12 o un poco más tarde».

Buenas impresiones

En el ecuador del certamen, «las impresiones son muy buenas», comentó el teniente de alcalde de Almazán. El Ayuntamiento cree que una buena asistencia podría rondar los 50.000 visitantes, cifra que previsiblemente se rebase. Al igual que en ediciones anteriores, «todo depende de la climatología, a la que estamos condicionados», agregó. La jornada de la inauguración entre los comentarios más sobresalientes del público y también de parte de los expositores era la gran presencia de maquinaria agrícola –este año más significativa que el anterior– y el nivel de todo lo expuesto.

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