La ‘gran manzana’ de Numancia

La campaña estival de excavaciones en Numancia, desarrollada en la conocida como manzana XXIV, bajo la supervisión del equipo arqueológico dirigido por Alfredo Jimeno, avanza con determinación, permitiendo la aportación de documentación significativa que contribuye a documentar la superposición estratigráfica de Numancia, que presenta una ciudad superior romana mientras, por debajo de ella, ‘desentierra’ dos ciudades celtibéricas.

Los trabajos de excavación, enmarcados en el marco del Plan de Investigación de la Junta de Castilla y León, se centran en una superficie que ocupa aproximadamente unos 1.600 metros cuadrados, y se han planteado como continuación de los trabajos iniciados en 2016, encaminados a valorar las posibilidades que puede ofrecer esta manzana completa.

Desde su inicio se han excavado cerca de 400 metros cuadrados, abarcando toda su anchura, de norte a sur y, en la actual campaña, el proyecto plantea trabajar en una superficie similar. Todo ello ha permitido que se haya podido delimitar la antedicha manzana XXIV «para conocer las características de su compartimentación general, para hacer la determinación de muros y estructuras a localizar y conservar».

Los trabajos realizados durante esta campaña de verano han permitido documentar el nivel de la ciudad romana, pudiéndose alcanzar, en una parte significativa de la manzana, el nivel de una ciudad celtibérica, que muestra evidencias de haber sido quemada y destruida, como se deduce de las características de los adobes y postes quemados, que constituían las paredes de las casas, que en gran medida se muestran disgregados por incendio. «Se han podido diferenciar algunos muros de casas celtibéricas y en algunas zonas determinar los suelos, pero todavía queda por rebajar una parte significativa de la manzana», reveló Jimeno.

resultados

Así, según se avanzó ayer «hasta el momento» se han podido documentar debidamente las estratigrafías, constatando los niveles de la ciudad de época romana y un nivel celtibérico, «que no hemos podido diferenciar todavía si se trata de la ciudad destruida por Escipión (133 antes de Cristo) o la ciudad destruida en las Guerras Sertorianas (75-72 antes de Cristo)». Asimismo, Jimeno aclaró que se había podido realizar «el posicionamiento de todos los materiales y estructuras, así como el índice de concentración de materiales y su densidad media».

Junto al avance de resultados, Jimeno detalló que en los trabajos de campo ha tomado parte un equipo formado por 60 personas (que lo han hecho en dos turnos de 30 cada uno), compuesto por doctores, licenciados y alumnos de la Universidad Complutense de Madrid, Universidad Autónoma de Madrid, Universidad de Salamanca, Universidad de Castilla La Mancha, Universidad de Zaragoza y York University de Canadá.

Este equipo, además, ha contado con un plus al resultar reforzado con la incorporación, durante esta primera quincena de agosto en curso, con el concurso de un total de veintidós jóvenes del campo de trabajo de modalidad de arqueología ‘La Numancia celtibérica’, que se desarrolla en Garray con el impulso de la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades (Dirección General de Juventud), en colaboración con la Diputación Provincial de Soria.

En cualquier caso, el delegado territorial de la Junta de Castilla y León en Soria, Manuel López Represa, visitó en la mañana de ayer el yacimiento arqueológico de Numancia, en desarrollo desde el pasado 17 de julio. La campaña de excavaciones 2017, financiadas por la Administración regional, cuenta con un montante global de 18.150 euros. López, compartió también la experiencia de los jóvenes participantes en el campo de trabajo ‘La Numancia celtibérica’, pudiendo comprobar, sobre el propio terreno, el avance de las obras de rehabilitación de la casa celtibérica, con una inversión prevista por la Consejería de Cultura y Turismo próxima a los 30.000 euros.

Por otra parte, también se adelantó la inminente aparición de una publicación esencial que recogerá buena parte de los más importantes hitos registrados durante veinte años de formidable trabajo en Numancia, en lo que será una monografía de enorme valor.

Reconstruir para poder divulgar.

La reconstrucción de la casa celtibérica, que se encuentra en estado muy avanzado, aportará valor añadido al yacimiento, toda vez que se trata de recursos muy valiosos para la divulgación de este espacio, ya que permiten comprender la tecnología y la forma de vida de la época por parte del visitante, obteniendo una experiencia más auténtica del lugar. Uno de los elementos principales de la actuación ha sido la reconstrucción de la cubierta. También se ha reparado el revoco exterior para reducir las fisuras mediante la aplicación manual de mortero de barro y se ha limpiado y aplicado revoco ligero de barro en el interior de la casa.