Más de 200 coches, obligados a pasar por el taller tras la tormenta

La fuerte granizada que se registró el pasado viernes en Ágreda no sólo dañó los campos de la localidad sino que arrasó con todo lo que encontró a su paso. Por ello los talleres mecánicos de la localidad no han parado desde entonces de recibir vehículos dañados. Todos llegan con bollos en la chapa y muchos de ellos lo hacen también con las lunes resquebrajadas por las grandes bolas de granizo.

En Talleres Vider han recibido «entre 150 y 200 coches». «Desde el día de la granizada empezamos a ir con la grúa a por los coches y empezamos a trabajar con ellos», explica su gerente, Javier Ruiz. Y es que tal es el incremento de trabajo en estos últimos días que el taller ha tenido que reforzar su plantilla con cinco profesionales. «Y eso que nos han traído los que peor están, los que no pueden circular porque tienen las lunas rotas», explica Ruiz.

En este taller indican que aunque los daños han sido importantes en un elevado número de vehículos «existe una solución». «Las lunas se cambian por unas nuevas y los bollos los sacamos uno a uno», indica.

Y así es, como por arte de magia, los daños provocados por la granizada en la chapa van desapareciendo. Los encargados de llevar a cabo este arreglo son los empleados de la compañía Varivericar. Uno de ellos lleva varios días trabajando en las instalaciones de Talleres Vider haciendo desaparecer los bollos de los coches uno por uno. «Algunos pueden llegar a tener más de 1.000», reconoce, y explica que la media es aproximadamente «arreglar un coche al día».

Por ello, desde el taller creen que estas tareas se alargarán durante un periodo de «dos o tres meses». «Al principio vinieron de golpe unos 150 coches, los que estaban más dañados y no podían circular, sobre todo al tener las lunas rotas, y son en los que estamos trabajando ahora», explica Ruiz, quien cree que todavía faltan vecinos de Ágreda que tengan que arreglar la chapa. «Calculo que al final arreglaremos unos 300», avanza, por lo que además de reforzar plantilla trabajarán durante los fines de semana.

En torno al 80% de los vehículos que han llegado al taller cuentan con un seguro que se hace cargo de la cuantía de los daños. «Hay seguros que incluyen los daños atmosféricos y también lo cubren los que están a todo riesgo», matiza. «Pero algunos son siniestro total y cuesta más el arreglo que el coche, así que sólo merece la pena arreglar las lunas», añade.

Ellos también sufrieron la ira del granizo. «Nuestros coches y los de nuestros clientes estaban en el aparcamiento y también resultaron dañados», comenta, y añade que también se rompieron algunos de los cristales del edificio.

Y es que los polígonos industriales con los que cuenta la localidad resultaron las zonas más dañadas por la fuerte tormenta. «Lo peor descargó en la zona entre Ágreda, Muro y Aldealpozo», indica.