La antesala de la Navidad sube la demanda de huevo

El último trimestre del año coincide con el de la recuperación de la demanda de huevos en España y en Europa, principalmente debido a la antesala de la Navidad y al ‘tirón’ de la industria para la elaboración de los dulces típicos. Así lo explica Mar Fernández, directora de la Interprofesional del Huevo y sus Productos, Inprovo, que constata la evolución «favorable» en el consumo de huevos en los hogares españoles, un 2,8% más en el primer semestre de 2018 respecto al mismo periodo del año anterior.

Una tendencia «positiva» que, según Fernández, refleja que el consumidor «ha perdido el miedo» a este alimento con gran valor nutricional y lo «coloca» habitualmente en la cesta de la compra. Aumenta el consumo de huevos y las exportaciones a lo largo del año. Una buena dinámica para Castilla y León que es una de las principales regiones productores, con un censo superior a las 30 millones de gallinas ponedoras.

Solo en los primeros siete meses de 2018, el sector ha exportado el valor completo del año pasado, lo que confirma una campaña «muy positiva». De la misma forma, España se consolida como uno de los países con mayor volumen exportado, se estiman unas 136.000 toneladas exportadas a lo largo de todo el año, además de como «país de referencia para encontrar huevos», por volumen y por su situación sanitaria.

No hay que obviar que en el sector del huevo, el mercado es coyuntural y responde a las crisis, especialmente por problemas sanitarios, como los del fipronil del verano de 2017 en Bélgica y Holanda u otros relacionadas con la influenza aviar. España tiene, en este sentido, un «buen» cartel sanitario» y de seguridad de los alimentos que le permite exportar «con garantías» prácticamente a todo el mundo.

El año presenta «buenas» perspectivas de cara a las exportaciones. No hay que olvidar que España es el tercer productor de huevos de la UE. Los principales destinos de la exportación de huevos de consumo están en Europa, sobre todo en Francia, Italia, Países Bajos, Alemania, Reino Unido o Portugal, según los datos de Inprovo. En cuanto a los terceros países, Israel es uno de los principales clientes, con un flujo continuo todo el año, como subraya Rafael Toribio, consejero delegado de Proegg, plataforma de venta conjunta integrada por 35 granjas de todas las comunidades autónoma. Representan actualmente un censo de 17 millones de gallinas y el 50% de la producción de huevo industrial.

Toribio confirma la fuerte demanda general de huevo en el último trimestre del año y la búsqueda de mercados competitivos. Frente a algunos mercados puntuales como Korea o Hong Kong, el grueso exportador se centra en la UE y en algunos países árabes este año. El mercado se ha estabilizado después de la subida de precios propiciada por la crisis del fipronil. «La reposición de gallinas en las granjas afectadas se ha notado traduciéndose en una bajada de precios».

Lo previsible, según el sector, es que, «si no hay incidentes» de aquí a finales de año, los precios se recuperen. El consejero delegado de Proegg estima en torno al euro el kilo el precio actual en origen, frente a los 75-80 céntimos de los meses pasados. «Hasta el mes de agosto, hemos tenido precios bajos «, asegura convenido de que hasta diciembre las cotizaciones «estarán fuertes». 

huevos sin jaulas

El sector afronta una buena campaña, aunque persisten otras preocupaciones como las relacionadas con los movimientos a favor de las granjas libres de jaulas. Desde Inprovo, su directora insiste en que «una gallina al aire libre no cuenta con un mayor bienestar animal». Intervienen, en su opinión, otros factores importantes como el manejo y el cuidado de las gallinas, es decir, el sistema de producción «no es mejor o peor a priori».

Recientemente, se ha registrado una iniciativa popular europea que propone una legislación para prohibir el uso de jaulas para gallinas ponedoras, conejos, parideras para cerdas y otros animales de granja. Está semana se abordará en el Parlamento Europeo una resolución no legislativa sobre bienestar animal en las granjas avícolas.

Desde Inprovo están interesados en «medir el bienestar animal con parámetros objetivos», para que el consumidor entienda «lo que hay detrás». Por eso, la Interprofesional prepara una campaña informativa para el año próximo con el objetivo de llegar a los compradores, y que éstos entiendan que «el huevo reúne todas las garantías y que los productores son los primeros interesados en que la gallina está bien». Una forma, dicen, de combatir la «desinformación que existe».

La directora de Inprovo confía en que la UE, «como ha hecho siempre», valore esta iniciativa basándose en argumentos técnicos y científicos. «Producimos huevos según las normas y las directivas existentes, veremos hasta dónde llegan estas propuestas».

En cuanto a la distribución, entiende que busquen una «diferenciación comercial» y una «mayor visibilidad ante sus clientes», por eso, «van más rápido que la propia decisión del consumidor». Y es que hay cadenas que ya han puesto fecha a la venta de huevos procedentes de gallinas en jaulas. Desde Proegg están convencidos de que el fin de la era de las jaulas afectaría también a la exportación, al producir más caro y bajar el nivel de producción. «Los costes son mayores y estaremos más expuestos a las crisis sanitarias», destacan.