El Procurador pide a la Junta que valore un informe de impacto ambiental para Nufri

El Procurador del Común de Castilla y León ha remitido dos cartas al Ayuntamiento de El Burgo de Osma y a la Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio de la Junta de Castilla y León ante las molestias de ruidos causadas por el funcionamiento del sistema antiheladas de la explotación hortofrutícola de La Rasa que desarrolla la empresa Nufri.

La Institución ha emitido una resolución, tras  admitir a trámite la queja de un particular, sobre las molestias de ruidos en la que también se puso en conocimiento que se había modificado la concesión de regadío. 

El Procurador, en su dictamen  pide a la Junta de Castilla y León que, al estar en tramitación la ampliación de caudal de riego de la finca Nufri ante la Confederación Hidrográfica del Duero, se valore «la necesidad de iniciar el procedimiento de evaluación de impacto ambiental».

Además, pide que durante dicha tramitación, se exija a la empresa hortofrutícola la adopción de las medidas correctoras e «incluso compensatorias pertinentes para intentar mitigar el impacto del sistema de antiheladas ya implantado», refiriéndose a las molestias por ruidos de las estufas y las torres ventiladoras.

Así como que se lleve a cabo una valoración por los técnicos competentes para que se implementes dichas recomendaciones técnicas que permitan disminuir el impacto acústico del establecimiento de turismo rural. 

Desde la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León todavía no han respondido a HERALDO DIARIO DE SORIA sobre la respuesta que habrían enviado al Procurador a este respecto. Desde la empresa declinan hacer declaraciones sobre este tema y apuestan por seguir trabajando en sus instalaciones, como han hecho hasta ahora.

Por otro lado, en la misiva remitida al Consistorio burgense, el Procurador solicita que se requiera a la empresa Nufri la la adopción de las medidas correctoras que permitan mitigar el impacto acústico, en el supuesto de la que la Junta acuerde no iniciar un nuevo procedimiento de evaluación de impacto ambiental, y que se valore que los técnicos municipal exijan a la empresa hortofrutícola implementación de dichas recomendaciones técnicas. 

Por otra parte, el Procurador del Común también ha comunicado  al Ayuntamiento burgense que se han archivado las actuaciones con respecto al Consistorio «al no constatar ninguna irregularidad invalidante en su actuación».

En el caso de la administración local, tiene un plazo de dos meses para comunicar la aceptación o no de dicha resolución, algo en lo que todavía están trabajando los servicios municipales, según confirmó el alcalde burgense, Antonio Pardo, porque todavía tienen plazo para presentar su respuesta.

La empresa de turismo rural ubicada en La Rasa se quejó ante esta institución por los ruidos que genera el mecanismo de torres  de ventilación en la explotación hortofrutícola  y que, a su juicio, generaba molestias a sus clientes. 

Los propietarios de la casa rural Lagar de Navazuela han remitido  numerosos escritos al Consistorio burgense  sobre este problema, que ha dado luz verde a la suspensión de los límites de los niveles del ruido durante cinco años en La Rasa. 

Recientemente  Nufri ha instalado nuevos cerramientos y sistemas de aislamiento en las viviendas afectadas de La Rasa, entre ellas este establecimiento de turismo rural. Estas obras, a pesar de las discrepancias entre ambas partes (Nufri y Lagar de Navazuela) se llegaron a ejecutar, aunque desde la empresa de turismo pedían una inspección para asegurarse si se había logrado el objetivo. 

Además, por otra parte, el Lagar de Navazuela también denunció a Nufri por la instalación de estufas californianas , empleadas para  minimizar  los daños que las heladas pueden causar durante la floración, alegando  las emisiones de humo,  causan  molestias. Según el informe del Procurador del Común no se ha adoptado ninguna medida para solucionar el problema. 

Tras la queja de vecinos de La Rasa, el servicio de Seprona de la Guardia Civil remitió una denuncia al Servicio Territorial de Medio Ambiente por una posible contaminación atmosférica y carecer Nufri de autorización para la instalación de dichas estufas.

El servicio de prevención ambiental de la Junta en Soria emitió  un informe en el que  manifestaba que estas estufas no requieren autorización del Gobierno regional por ser focos no sistemáticos, lo que haría que no se incluyan en el catálogo de actividades potencialmente contaminadoras de la atmósfera, por su carácter temporal.