Fútbol
Los Rodríguez Nebreda: uno entrena al Numancia y el otro es doble campeón del mundo de fútbol sala
El míster rojillo Ángel presume de hermano pequeño con el mítico Javi Rodríguez, el Messi del fútbol sala español, que en la actualidad es el técnico del Barça. "Sin duda, el bueno de la familia era él, lo ha ganado todo", afirma el numantino

La familia Rodríguez Nebreda: de izquierda a derecha José Miguel, Ángel, Ángel senior, Javi, Benjamín y Aurelia.
La familia Rodríguez Nebreda puede presumir de llevar el balón en la sangre gracias a Ángel y a Javi. El primero es el entrenador del C.D. Numancia y el segundo es el técnico del Barça, aunque en ese caso de fútbol sala, un deporte en el que tocó el cielo como jugador siendo doble campeón del mundo y elegido en 2005 el mejor del planeta. Dos hermanos que comparten muchas inquietudes en los banquillos y que son competitivos por naturaleza. Ángel quiere triunfar en Los Pajaritos llevando al equipo a Primera Federación y Javi aspira a recuperar la grandeza del equipo culé, sin títulos que llevarse a la boca la pasada campaña.
Son cuatro hermanos de madre burgalesa y padre leonés que por necesidades de la vida formaron una familia en la localidad barcelonesa de Santa Coloma de Gramanet. Ángel es el primogénito. Después llegaron Javi, José Miguel y Benjamín, que también fue futbolista como mediocentro, aunque militando en clubes no profesionales. "El fútbol era nuestra pasión. La de cosas que le habremos roto en casa a mi madre con la pelota", comenta el míster numantino, quien añade que "el bueno de verdad era Javi. Lo ha ganado todo en el fútbol sala".
Ángel y Javi tienen en común el regreso a los clubes que les vieron triunfar vestidos de corto. Una etapa que ya queda lejana y que quieren revivir sentados en los banquillos de Los Pajaritos y del Palau. Éxitos que celebrarían por todo lo alto en la casa de los Rodríguez Nebrera. Cada uno a lo suyo, pero muy pendientes de la trayectoria del hermano.
Ángel fue a finales del siglo pasado una de las piezas importantes del Numancia para empezar a labrar la etapa más brillante de la entidad. Fue uno de los héroes de la salvación en Segunda División en 1998 y del posterior ascenso a Primera en 1999. Temporada y media para dejar huella en Soria, una ciudad que le ha acogido con los brazos abiertos y con toda la ilusión del mundo para capitanear la nave numantina hacia el ascenso.
El segundo de los Rodríguez Nebreda, Javi, fue elegido en 2006 para lanzar la sección de fútbol sala del Barça y su aportación en la pista se notó rápidamente ya que el equipo pronto reinaría en España y también en el mundo. "Fue el fichaje galáctico de Joan Laporta", recuerda Ángel, quien a la hora de hablar de su hermano apunta que "hasta los 17 años jugó al fútbol como extremo y era muy habilidoso". Javi tomó una buena decisión al colgar la botas de futbolista y calzarse las zapatillas de fútbol sala. "A los 18 años ya era internacional con España", señala el numantino.
Tras curtirse en el Sant Andreu y en el Industrias García, Javi Rodríguez, delantero de olfato, fichó por el Playas de Castellón (1997), donde ganó dos ligas, tres Copas de la UEFA y una Supercopa de España. Méritos que le valieron para llegar al Barcelona en 2006, donde sumó otras dos Ligas, dos Copas y dos Copas de España, además de la Champions -la antigua Copa de la UEFA- en 2012. Capitán y pichichi, también con la selección española, disfrutó de más internacionalidades que nadie (170), además de conquistador de dos Mundiales y cuatro Eurocopas.
Tras colgar las botas, Javi Rodríguez dio el salto al banquillo en 2017 para entrenar en Hungría, donde ganó una Liga y llevó a su equipo a la Final Four. Luego entrenó en Italia y en Ucrania. En 2019 recaló en Industrias Santa Coloma y en 2022 en ElPozo Murcia. El curso pasado estuvo en el Veszprém húngaro -campeón de liga- y por unos meses entrenó al Kuwait Club Futsal para ampliar su palmarés con una nueva Copa y otra liga. El pasado verano llegó al Barça con todos los honores, como lo hace una de las leyendas del fútbol sala español.

Javi Rodríguez, el primero agachado por la izquierda, como capitán de la selección española de fútbol sala que jugó en Los Pajaritos ante Portugal.
Ángel y Javi están decididos a triunfar en los banquillos del Numancia y del Barça en una temporada tan exigente como apasionante. El éxito de ambos sería muy celebrado en el domicilio familiar de los Rodríguez Nebreda. Dos entrenadores con carácter ganador que cumplieron el sueño que tuvieron cuando eran niños de brillar en el deporte.