Raquel Martínez. Secretaria general del Consejo General de Colegios Farmacéuticos
«La farmacia debe aprovecharse para aumentar la capacidad asistencial del sistema sanitario»
No es una mera dispensadora de medicamentos, tiene muchas posibilidades en servicios de salud pública pero hay que facultarla para ofrecerlos

Raquel Martínez, secretaria general del Consejo General de Colegios Farmacéuticos y vicepresidenta de la Federación Internacional Farmacéutica.
La soriana Raquel Martínez, secretaria general del Consejo General de Colegios Farmacéuticos y vicepresidenta de la Federación Internacional Farmacéutica, comenzó su vida profesional en una farmacia rural, un activo sanitario que fija población y genera empleo, al que todavía se le puede sacar mayor beneficio. En general, los farmacéuticos deben ser aprovechados para aumentar la capacidad asistencial del sistema sanitario, en especial de la Atención Primaria, destaca. Si se ampliara la facultad para sustituir formatos de medicamentos descargarían a los centros de salud y si se implantara un canal de comunicación con los médicos podrían darse soluciones más ágiles a los pacientes.
Pregunta. Después de medio año desde su nombramiento como vicepresidenta de la Federación Internacional Farmacéutica, ¿cómo compara la atención y capacidad de acción de las farmacias de Soria, como parte del conjunto nacional, con respecto a otros países? ¿Algo que ‘importar’ o ‘exportar’?
Respuesta. Nuestro modelo de farmacia es marca España, un referente a nivel internacional y especialmente en Europa e Iberoamérica donde se valora enormemente la cercanía y accesibilidad de la red de 22.222 farmacias españolas. Somos, de hecho, el país, tras Grecia, con más farmacias por habitante de Europa. Las farmacias sorianas son un buen reflejo de nuestro modelo de farmacia, protagonizado por una farmacia rural y cercana al ciudadano que, además, va más allá de la dispensación de medicamentos, ofreciendo servicios asistenciales y de salud pública. Este esfuerzo de nuestras farmacias por ir más allá de la dispensación de medicamentos y participar también en tareas como la educación y promoción de la salud se ha visto en el proyecto de Escuelas Rurales de Salud, que ha sido reconocido por la Federación Internacional Farmacéutica como mejor campaña de promoción de la salud del mundo. Una iniciativa en la que participaron farmacias de toda Castilla León y cuyo germen podemos situar precisamente en Soria, hace ya una década, cuando comenzamos con las charlas del programa de educación sanitaria que pusimos en marcha desde el Colegio en colaboración con la Diputación Provincial.
P. Fue una iniciativa pionera.
R. Puedo decir con orgullo que las farmacias castellanas y leonesas, incluyendo las de Soria, tienen la esencia de la farmacia española y han liderado iniciativas pioneras, cuyos excelentes resultados estamos presentando en encuentros nacionales e internacionales. Ahora bien, hay que entender que, a nivel global, las sociedades son diferentes y sus sistemas sanitarios y modelos de farmacia también lo son. Tenemos que incorporar aquello que más pueda aportar a la profesión en su conjunto y, en última instancia, a la sociedad. Desafíos como nuevas pandemias, los problemas de suministro de medicamentos o las resistencias antimicrobianas son comunes en todo el planeta y estamos convencidos de que la farmacia puede ser parte de la solución. Por ello, en estos momentos estamos inmersos en una campaña cuyo objetivo es conseguir que los gobiernos comprendan el valor de la farmacia para afrontar estos retos. Conseguir que cuando se piense en salud, se piense en farmacia, como dice el lema de esta iniciativa de la Federación Internacional Farmacéutica.
P. Las dificultades que arrastran las farmacias rurales, tan frecuentes en Soria, las conoce perfectamente, ¿qué futuro les augura y qué soluciones caben teniendo en cuenta la persistente despoblación?
R. Soy especialmente sensible a este problema porque lo he vivido. Castilla y León es la Comunidad con el porcentaje más alto de farmacias con la Viabilidad Económica Comprometida, un 13%, dato que crece hasta un 25,8% en el caso de Soria. Desde la Organización Farmacéutica Colegial trabajamos por garantizar la sostenibilidad de estas farmacias y para ello promovemos iniciativas, proyectos y propuestas enfocados a aprovechar todo su potencial. Así, en enero de 2023 presentamos el informe Aportación de valor del modelo de Farmacia a la cohesión social y el reto demográfico, que concluyó que la farmacia rural es un activo sanitario que contribuye a fijar población y favorece el empleo. Es por tanto un esencial para combatir la despoblación. Fruto de esta labor en marzo del mismo año suscribimos con los Ministerios de Sanidad, Transición Ecológica y Reto Demográfico y Derechos Sociales y Agenda 2030, el Programa de Farmacia Comunitaria Rural.
P. ¿Ya de frutos?
R. En breve se iniciará un pilotaje en una comunidad autónoma para reforzar los servicios sociosanitarios en el ámbito rural a través de sus farmacias. Pilotaje al que esperamos que se sumen otras autonomías, y por qué no, Castilla y León. Porque salvar nuestros pueblos pasa por salvar sus farmacias, el recurso sanitario más cercano y accesible; y en este objetivo hay que dar un paso al frente con medidas como esta. Además, hemos propuesto crear incentivos fiscales para las farmacias rurales; remunerar los Servicios Profesionales Farmacéuticos, que ha demostrado ser necesarios para los pacientes y eficientes para el sistema sanitario; retribuir los servicios de guardia continua, particularmente urgente en las farmacias de pequeños municipios.
P. ¿Ve alguna solución posible en Villar del Río?
R. En estos momentos el acceso al medicamento y a la prestación farmacéutica está garantizado con un botiquín en coordinación con el consultorio local. En estos casos siempre insisto en que es necesario buscar el equilibrio entre asegurar el acceso a los medicamentos a todos los ciudadanos de manos de un farmacéutico y garantizar la sostenibilidad de la red de farmacias.
P. La falta de médicos de atención primaria deja un evidente agujero que en ocasiones han de cubrir las farmacias ofreciendo soluciones a los pacientes, ante por ejemplo la gripe actual. ¿Cómo puede contribuir el farmacéutico a compensar esa ausencia de profesionales médicos? ¿Puede potenciarse la labor asistencial con una regulación que otorgue mayores atribuciones?
R. Sin duda si desarrollamos la labor de los farmacéuticos estaremos reforzando nuestro Sistema Nacional de Salud. Hay que recordar que la farmacia comunitaria se consolida como el recurso más accesible y mejor valorado por los ciudadanos, según la última encuesta del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS). La farmacia y los farmacéuticos deben ser aprovechados para aumentar la capacidad asistencial del sistema sanitario, en especial de la Atención Primaria a través de la concertación autonómica de servicios en las farmacias. Servicios que además están reclamando los ciudadanos como confirmó un estudio de la consultora GAD3, que concluyó que el 80% de los españoles reclama más servicios desde las farmacias, y nueve de cada diez piden una mayor integración con la Atención Primaria. Muchas veces la gente lo desconoce, pero las farmacias ofrecen ya servicios que permiten descongestionar otras estructuras sanitarias. Recientemente presentamos el primer Mapa de Servicios Farmacéuticos de España que muestra una amplia cartera de servicios en las farmacias comunitarias que van más allá de la dispensación de medicamentos, pero que se ha ido extendiendo de manera muy desigual según las comunidades autónomas e incluso según las provincias, aspecto que tendremos que trabajar para corregir. En cuanto a la legislación, el Ministerio ya ha anunciado que en la tramitación de la futura Ley del Medicamento quiere incorporar algunas medidas que desarrollen la labor de los farmacéuticos y aprovechen aún más su potencial.
P. ¿Qué servicios que funcionen en otros territorios pueden implantarse en Soria, y en Castilla y León por extensión?
R. Castilla y León en este sentido es un buen ejemplo porque dispone de algunos de estos servicios como quedó reflejado en el Mapa que he mencionado antes. Desde la red de Farmacias Centinela, cuyos resultados han sido presentados en diferentes congresos; los cribados de VIH consolidados ya desde hace años; su colaboración en las campañas de vacunación para derivar a los grupos de riesgo o el servicio de reacondicionamiento mediante los Sistemas Personalizados de Dosificación (SPD). En un ámbito más social quiero destacar la importancia de que las 1.596 farmacias comunitarias de Castilla y León se convirtiesen en Punto SOS (Seguridad y Orientación, Siempre) para las víctimas de agresiones sexuales, ayudándolas, orientándolas y derivándolas hacia los recursos de emergencia, sociales o sanitarios. Todos estos proyectos hacen de nuestra comunidad un referente en servicios farmacéuticos. Pero todavía queda mucho por hacer si queremos optimizar todos los profesionales y recursos sanitarios, incluidas las farmacias y los farmacéuticos, en un escenario de presión asistencial creciente. Así, por ejemplo, sería fundamental implantar canales de comunicación entre los farmacéuticos comunitarios y centros de salud, lo que permitiría ofrecer una solución más ágil y conjunta a los pacientes en determinadas ocasiones.
P. En un mundo digitalizado, pienso en el comercio on line, ¿cómo se están adaptando las farmacias? ¿Para las zonas más despobladas podría ser una solución, aplicando las garantías precisas?
R. La profesión farmacéutica fue pionera en la implantación de nuevas tecnologías para la mejora del servicio. Hay que recordar que la receta electrónica comenzó a extenderse hace ya dos décadas. Desde una perspectiva global puedo asegurar que esto es un hito, ya que hay países desarrollados que están aún en proceso de arranque. Ahora bien, para nosotros digitalizar es humanizar, las tecnologías deben emplearse para reforzar el carácter humano de la asistencia sanitaria, nunca para levantar barreras. Hay que aprovechar todo su potencial para mejorar procesos o promover la comunicación con el resto de los profesionales sanitarios, pero preservando la asistencia personalizada y garantizado siempre la permanente custodia, dispensación y entrega del medicamento por el farmacéutico. Una garantía para aportar eficacia y seguridad en el uso de los medicamentos.
P. La pandemia sirvió para reforzar la labor del farmacéutico, ¿qué lecciones dejó el covid?
R. Sin duda las crisis nos deben hacer aprender y la pandemia nos deja muchas enseñanzas. En el caso de la profesión farmacéutica quiero destacar la gran labor realizada por cada farmacéutico desde los hospitales, los laboratorios clínicos, la distribución, la industria e investigación, la salud pública y otros muchos ámbitos profesionales. Si nos fijamos en la farmacia comunitaria, acuñamos aquello de la cruz verde de la farmacia no se apaga, porque la pandemia confirmó el carácter asistencial del farmacéutico, pero también su capacidad de escucha y acompañamiento en los peores momentos. Fuimos luz en tiempos de oscuridad. Además, se consolidaron servicios como los cribados mediante test o la dispensación colaborativa de medicamentos hospitalarios en farmacias comunitarias gracias a la colaboración de farmacéuticos hospitalarios, comunitarios y de la distribución. Servicios que por su eficacia y eficiencia deberían extenderse a toda la red de farmacias.
P. ¿La farmacia también está sometida a los peligros de los bulos?
R. Sin duda la salud y el medicamento son objetivo prioritario de los bulos y la desinformación, y por eso somos especialmente activos frente a ellos, porque suponen un peligro para la salud pública. En primer lugar, lo hacemos desde todos y cada uno de los más de 22.222 mostradores de las farmacias, verdaderas aulas de salud en las que más de 56.000 farmacéuticos resuelven las dudas de los pacientes y ofrecen información rigurosa y objetiva. Pero, además, fuimos pioneros en la incorporación de las nuevos canales de comunicación como Youtube así como a través de las redes sociales – Tik Tok, X, Instragram – desde donde llegamos directamente a todos los públicos y ofrecemos contenidos de actualidad en torno a la salud. En la actualidad solo nuestro canal de Youtube cuenta con más de 620.000 seguidores y sus videoconsejos cuentan con 130 millones de visualizaciones. El mensaje es claro, en el caso de los medicamentos el mejor influencer es el farmacéutico. No en vano, siempre escuchamos aquello de “en caso de duda consulte con su farmacéutico”, como especialista universitario en el medicamento.
P. Ante el desabastecimiento de determinados medicamentos, ¿la posibilidad de que los farmacéuticos dispensen otros formatos o similares sería una solución?
R. Los problemas de suministro representan un problema global y la propia FIP es también sensible. En este sentido, los farmacéuticos, sin ser responsables de este problema, estamos colaborando activamente para resolverlo, actuando con profesionalidad y empatía, desde esa doble perspectiva de profesional sanitario especialista en el medicamento y también más cercano al ciudadano. En primer lugar, desde la Organización Farmacéutica Colegial hace ahora una década pusimos en marcha el Centro de Información sobre el Suministro de Medicamentos (CISMED) que ofrece información continua sobre los fármacos con problemas. CISMED cuenta con más de 10.000 farmacias adheridas y nos permite disponer de datos sobre incidencias en el suministro de medicamentos en cada provincia. Pero hemos querido dar un paso más y en 2012 lanzamos Farmahelp, la herramienta de la Organización Farmacéutica Colegial que permite al farmacéutico comunitario consultar con farmacias cercanas la disponibilidad de un medicamento con problemas de suministro. Farmahelp tiene en parte su origen en nuestra tierra, ya que nació en el Colegio de Farmacéuticos de Palencia. Ahora bien, en muchas ocasiones la falta de un medicamento se soluciona con la intervención profesional del farmacéutico mediante la sustitución. Como bien señala, si se amplía esa capacidad de sustitución, como venimos solicitando, permitiendo el cambio de forma farmacéutica, resolveríamos muchísimas más situaciones evitando al paciente volver al centro de salud y descargando de presión asistencial a los centros de salud.
P. ¿Cómo es la relación con las grandes farmacéuticas, esas con capacidad para investigar y encontrar fármacos que ayuden a paliar enfermedades que son aún insondables?
R. La investigación y el desarrollo de nuevos medicamentos es fundamental para salvar vidas y tratar enfermedades, labor en la que quiero recordar que trabajan miles de farmacéuticos. Como Organización Farmacéutica Colegial nuestra relación con las compañías farmacéuticas es muy buena y fluida. Es cierto que ahora estamos trabajando para que las innovaciones terapéuticas estén siempre disponibles en las farmacias comunitarias, ya que en demasiadas ocasiones se aprueban para su dispensación en farmacias hospitalarias, muchas de ellas por necesidades clínicas, pero no siempre, lo que representa un obstáculo en la accesibilidad del medicamento para los pacientes. El éxito de un nuevo medicamento, de una innovación farmacológica, no termina con su descubrimiento, hay que hacerlo accesible a los pacientes facilitando su dispensación en la farmacia comunitaria más cercana.
P. ¿Qué balance hace de estos meses en la vicepresidencia de la FIP y qué retos y proyectos tiene entre manos?
R. En primer lugar, he decir que han sido meses muy intensos de trabajo por la profesión, lo que me enorgullece, y que me han permitido ya conocer mejor la farmacia de una manera más global. Como vicepresidenta de la Federación Internacional Farmacéutica mi rol consiste en desarrollar y ejecutar la estrategia para contribuir a que la profesión, en todos los ámbitos, desarrolle todo su potencial al servicio de la población. Aunque nos pueda parecer que una federación internacional es algo que nos suena a lejano, su labor nos toca muy de cerca a todos. Así, en estos momentos estamos trabajando en torno a ámbitos como las resistencias antimicrobianas, la seguridad del paciente o las nuevas amenazas en salud pública, prioridades en todo el mundo, también en las farmacias de Soria.