Heraldo-Diario de Soria

CULTIVOS

La cosecha trufera cae a la mitad y se sitúa en 1.000 kilos

La producción mayor será la de fincas cultivadas, según los truficultores

Un perro buscando trufa con su amo en una finca de la provincia.

Un perro buscando trufa con su amo en una finca de la provincia.

Publicado por
Pilar P. Soler
Soria

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No se ve, pero cada invierno, a partir de diciembre y hasta marzo, se la busca con ansia. Pasado el escaparate mediático del congreso de la trufa, con el atractivo del recurso enfocado a su fase final, la gastronómica, el protagonismo de la trufa se traslada a cielo abierto. La producción de campo de trufa será este año «floja, pero ligeramente mejor que la campaña pasado». Así lo cree la Asociación de Truficultores de Soria, desde la que se calcula una cosecha de trufa de alrededor de unos 1.000 kilos, según su portavoz, José Manuel Pérez.

La cifra es la mitad de la cosecha de un año con «campaña normal, en que la producción estimada está en torno a los 2.000 kilos. Algún año puntual se han podido recolectar quizá 3.000 pero eso sucede de forma excepcional y ocurre una vez en la década», agrega el truficultor.

La asociación no se atreve a cuantificar la producción silvestre y la cultivada en ese millar de kilos, si bien estima que la trufa de campo «se salvará un poco por las lluvias caídas a finales de agosto. La preveíamos nula y pasa a ser muy floja», añadieron.

La especie principal que se comercializa en Soria es la trufa negra (tuber melanosporum), aunque también hay la llamada trufa de verano (tuber aestivum), si bien en mucha menor cantidad.

La producción de trufa silvestre no es la que era y desde hace unos años ha caído ligeramente, lo que sin embargo no afecta a la producción que hay en la provincia, donde las plantaciones de truficultores van en aumento. La producción en fincas ha sido siempre mayor pero si hace unos años «hablábamos de un porcentaje del 60% en plantaciones y un 40% en las de trufa silvestre, ahora ese porcentaje ronda el 90% en fincas y el resto en campo», comenta José Manuel Pérez.

Así, Soria es una de las provincias productoras de trufa, pero no con los porcentajes que en ocasiones se dicen, según fuentes de la asociación de truficultores. «Estaremos en el 5% del total nacional, lejos del 30% que a veces se ha comentado», apunta la citada fuente que estima la producción anual en toda la geografía nacional en unos 50.000 kilos de trufa. Castellón, Teruel, Huesca, Guadalajara y las comunidades de Cataluña y Navarra tienen también potencial trufero, sin olvidar la provincia de Burgos, con «la mitad de lo que se recoge en Soria».

La geografía provincial posee más de 74.000 hectáreas de masa forestal, donde potencialmente puede nacer la trufa negra, de las que unas 1.800 son fincas preparadas sólo para el cultivo, según fuentes de Cesefor, cifras en las que coincide la asociación de truficultores.

Investigaciones sobre este producto micológico apuntan a las características del suelo, además de la altitud y el clima como el principal abono para que haya tanta trufa negra en Soria y, además, sea tan apreciada en la cocina internacional.

El nuevo decreto micológico ha establecido diferencias entre la campaña en trufa de campo y la de plantaciones en que se cultiva, donde pasa a ser más larga, concretamente un mes. Las fechas en que se mueve la recogida en trufa silvestre son entre el uno de diciembre y el 15 de marzo. Mientras, en el caso de la silvestre comenzará los próximos años el 15 de noviembre y en esta campaña concluirá el 31 de marzo (el decreto entra en vigor el uno de enero).

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