INFRAESTRUCTURAS
El Gobierno da luz verde a la ansiada ampliación del aeródromo de Garray
Serrano ya trabaja con Somacyl para lanzar la licitación de la redacción y ejecución del proyecto
Tras varios años empantanada en la tramitación administrativa, la ampliación de la pista del aeródromo de Garray, y con ella el desarrollo del proyecto del Aeroparque Tecnológico e Industrial (ATI) que impulsa la Diputación, logra el visto bueno ambiental. El Boletín Oficial del Estado (BOE) publicó ayer la resolución que formula el informe de impacto ambiental y que desbloquea la iniciativa. El presidente de la Diputación, Benito Serrano, celebra una noticia que permitirá que la pista del aeródromo pase de 1,4 kilómetros a 2,1 y que el enclave aeronáutico pueda acoger naves de gran tamaño como los A-320 o los B-737.
A nivel administrativo, la principal cuestión que resuelve la resolución publicada ayer es que «como resultado de la evaluación de impacto ambiental practicada, que no es necesario el sometimiento al procedimiento de evaluación ambiental ordinaria del proyecto ya que no se prevén efectos adversos significativos sobre el medio ambiente». Esto implica que la iniciativa ya cuenta con el visto bueno ambiental –siempre que cumpla las prescripciones decretadas– evitando de esta forma una evaluación ordinaria que es mucho más compleja y, sobre todo, hubieses alargado aún más el trámite ambiental.
El proyecto de ampliación inició su tramitación hace poco más de un año, el 2 de septiembre. Ahora mismo, el aeródromo tiene un uso «restringido-especializado» en «aviación general y deportiva, escuela de vuelo y mantenimiento en base de aviones de aviación general». Uno de los usos que se añade es el de «estacionamiento y preservación tanto de aviación general como comercial».
En el documento se explica que no se prevé un aumento del tráfico de aviación general –1.800 operaciones al año– con una media de 5 anuales, aunque «en eventos especiales puede aumentar el pico de actividad». Una de las claves de la ampliación es que «va a permitir que tengan lugar operaciones de aviación comercial, para estacionamiento y preservación, que como máximo van a representar entre 5 y 20 operaciones al año con aeronaves de modelos diversos –B737 o A320–.
Según consta en el documento publicado por el BOE la finalidad del proyecto es «permitir operaciones con aeronaves de mayor tamaño y aumentar su seguridad». Entre las cuestiones incluidas figuran la ampliación de la pista principal en ambas cabeceras lo que provocará que pase de 1.380 metros a 2.092 metros y de una anchura de 23 metros a 45 hacia el norte «a excepción de las zonas de giro en ambas cabeceras que tendrán una anchura total de 92,40 metros». En los laterales de la pista, hasta una anchura de 75 metros desde el eje y a cada lado, se continuará la explanación con una pendiente del 1,5 %.
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Además, se van a llevar a cabo pavimentaciones de hormigón en un total de 8.575 metros cuadrados para la construcción de una nueva calle de rodaje para la pista principal, una nueva plataforma para la ubicación de dos depósitos de combustible aéreos de 15.000 y 20.000 litros, respectivamente y una nueva plataforma para estacionamiento de aviación general.
El visto bueno ambiental está condicionado a 22 prescripciones fijada en la resolución del BOE. Entre ellas figuran que se debe priorizar el despegue desde la cabecera 27 y la aproximación por la 09 «siempre que las condiciones de viento así lo permitan, salvo que ello produzca una condición insegura, a juicio del piloto, evitando así sobrevolar la población de Garray». Además, será necesario un seguimiento «periódico» del impacto acústico sobre Garray.
El presidente de la Diputación, Benito Serrano se mostró satisfecho por el «desbloqueo» de la ampliación y reveló que la semana pasada la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA) comunicó la resolución. Desde ese momento, desde la Diputación se contactó con la empresa pública Somacyl para avanzar en el desarrollo del proyecto. La idea, según explicó Serrano, es intentar ahorrar tiempo licitando de forma conjunta la redacción y la ejecución de la ampliación del aeródromo. Cabe recordar que se estima que la actuación movilizará una inversión de unos 4 millones de euros. «El escenario en el que se trabaja es que alrededor de la próxima primavera la obra ya esté lanzada», destacó Serrano. «Nos ca a permitir tener más capacidad, mayor volumen de operaciones y aviones más grandes, el aeródromo será un referente entre las instalaciones del centro de la península con unas condiciones ambientales únicas», remarcó añadiendo que «tenemos empresas pendientes que deseaban tener certezas en cuanto a las fechas para poder concretar sus proyectos».