Micología
¿Es demasiado tarde para salvar la campaña de setas en Soria? La IA y la experiencia dicen que no
Grok, la inteligencia artificial de X, y las temperaturas en el primer mes del otoño invitan a mantener la esperanza a la espera de lo que 'decida' la meteorología

Una cesta 'mixta' de boletus y níscalos cogida a 25 de noviembre de 2022, lo que muestra que aún queda tiempo para que puedan producirse fructificaciones.
Recolectores, hosteleros y micoturistas miran al cielo con cierta inquietud. La campaña micológica de otoño 2025 no ha comenzado en Soria y ni las setas ni los boletus han asomado todavía y el calendario ya transita por mediados de octubre. ¿Todavía se está a tiempo de 'salvar' la temporada? ¿Si se dan las condiciones, aún se podrá llenar alguna cesta?. La experiencia dice que sí. La inteligencia artificial (IA), que también. El cielo decidirá, pero hay esperanza.
La situación actual es de sobra conocida. "Un níscalo y con gusano. Es que no hay ni malas", apuntaba el pasado fin de semana un recolector tras un paseo en familia por Pinares. "Si es que el monte cruje al andar", confirmaba otro aficionado a la recolección de setas. La lluvia parece la clave para que se pueda producir alguna brotada.
Las condiciones más importantes para que se produzcan fructificaciones son de hecho dos. Una humedad abundante en el terreno y temperaturas que no traigan heladas fuertes. En este sentido, el níscalo y el rebozuelo son algo más resistentes que el boletus, termófilo y más sensible a las cifras bajo cero; o que la seta de cardo y la macrolepiota.
Soria
Mycotour edita una micoguía para seguir divulgando sobre las setas de Soria
Heraldo-Diario de Soria
Hasta ahora las temperaturas han acompañado. A pesar de alguna helada puntual, no han sido especialmente fuertes ni generalizadas. Las máximas han superado por poco los 20 grados y bosques como el pinar ayudan a proteger en cierta medida los suelos frente a las mínimas. Por esa parte se ha cumplido.
El capítulo de las lluvias va peor. Las precipitaciones han sido muy escasas desde principios de verano y han sido más tormentas puntuales que episodios prolongados y extendidos. La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) preveía cambios en breve, así que también se puede salvar la campaña micológica en este sentido aunque en todo caso quede recortada por un comienzo tardío.
Por fechas, la experiencia dice que todavía puede ser factible acercarse a los montes y praderas de Soria y llenar la cesta. Los inicios se vienen retrasando desde hace unos años. Un ejemplo está en la propia sabiduría popular. A los boletus se les llama 'migueles' porque para San Miguel, el 29 de septiembre, solían brotar de forma generalizada. En la última década para esa fecha sólo en tres años había buenas fructificaciones en altitudes sobre los 1.200 metros, en el resto hubo que esperar.
Además, las campañas suelen alargarse un poco más. Lo de coger níscalos en el puente de la Inmaculada y la Constitución no es raro; y la cesta que ilustra estas líneas se recolectó a 22 de noviembre de 2022, con boletus no muy maduros, lo que evidencia que no llevaban mucho en el monte y podrían haber brotado perfectamente a mediados del undécimo mes del año.
Toca esperar, pero ¿cuánto? De nuevo influyen factores ambientales desde la caída de las lluvias. Las temperaturas, el viento y hay quien dice que incluso la luna pueden acelerar o retrasar los brotes desde que se generan las condiciones idóneas. Por lo general se puede decir que en 15 ó 20 días desde que el monte se 'empapa', si todo va bien. puede haber una buena 'cosecha' esperando al recolector. Así, a mediados de noviembre sería posible volver del monte con la cesta llena y la navaja sucia si mejoran las condiciones.
También la IA confirma que la campaña, aunque recortada, todavía puede dejar alguna alegría. Le hemos preguntado a Grok, la inteligencia artificial de X (antes Twitter). "No es necesariamente demasiado tarde para encontrar brotes de setas en Soria en octubre de 2025, pero la situación depende mucho de las condiciones climáticas. Según la información disponible, la temporada de setas en Castilla y León, y específicamente en Soria, ha tenido un arranque lento este año debido al calor diurno y la sequía, lo que ha retrasado y reducido la fructificación en comparación con años anteriores. Sin embargo, todavía hay esperanza si las condiciones mejoran", señala.
Grok también detalla qué hace falta para que se salve la campaña. "Para que las setas prosperen, se necesitan varios días de lluvias consistentes que empapen el suelo, seguidos de temperaturas suaves (entre 8-20 ºC), noches húmedas, poco viento y ausencia de heladas. Si octubre o noviembre traen precipitaciones y el suelo conserva humedad, todavía podrían aparecer brotes, especialmente de especies otoñales como níscalos, boletus, setas de cardo o incluso algunas tardías como las angulas de monte".
A la hora de escoger dónde probar suerte la IA también tiene sus preferencias. "En Soria, los pinares, robledales, castañares y bosques de ribera son ideales para la recolección. Navaleno, en particular, es un punto destacado por su abundancia de especies como boletus, níscalos y rebozuelos, y cuenta con un Centro Micológico que organiza actividades para explorar estas zonas". También recomienda sus jornadas micológicas o el Micotour de Otoño 2025 organizado por Montes de Soria, que "recorre 30 localidades en octubre, noviembre y diciembre, con exposiciones y rutas guiadas".
Aunque Grok lo tiene difícil para intoxicarse, incide en un consejo que los expertos y las autoridades no dejan de repetir: "Asegúrate de identificar correctamente las setas para evitar especies tóxicas. Lleva una guía de campo o consulta con expertos en los centros micológicos".
En conclusión, "no es demasiado tarde para encontrar setas en Soria este otoño, pero todo depende de las lluvias y las temperaturas en las próximas semanas. Si el clima coopera, octubre y noviembre aún pueden ofrecer buenas oportunidades, especialmente en zonas reguladas y con actividades organizadas como las del Micotour". Eso sí, toda pasa por que venga lluvia abundante y no hiele. Más vale tarde que nunca, y si finalmente brotan setas y boletus en los montes sorianos sabrán aún mejor tras la espera. Las nubes 'deciden'.